Hecho en Puerto Rico

6.446 NO ES SOLO UN NÚMERO

Josep-Maria Ureta

No son las películas que nos llegan cuando la industria cinematográfica con sede en Los Ángeles decide que es la hora de mover la compasión y la duda. Se cuentan por decenas esos filmes, algunos dirigidos y protagonizados por gente que en Europa consideramos compañeros de viaje ideológico. Buenas películas con buenos actores que denuncian lo absurdo de la pena de muerte, porque suma más abyección a la que se pueda atribuir a los reos ejecutados.

Pues sí hay una mejor manera de hacer este tipo de denuncias. Por ejemplo, explicar la historia personal de un condenado a muerte que estuvo 6.446 días en el corredor de la muerte –la galería destinada a quienes están condenados a muerte– en una prisión de Florida y que hoy está libre. Se llama Juan Meléndez y su biografía ha merecido ser contada en un reportaje audiovisual de amplia repercusión mundial. Quien tuvo la idea de realizarlo fue Luis Rosario Albert, puertorriqueño, que ayer presentó en Barcelona este documental que ha obtenido numerosos premios, también en EEUU.

Antes de la proyección, contaba Albert que su guía primigenia era la película de Bob Balaban The exonoretated. Pero poco a poco descubrió que la inocencia de Meléndez era palmaria. Entonces decidió incorporar y dar más protagonismo a la madre del condenado a muerte, que en el filme suelta frases de las que dejan huella: «Igual que tu hijo, mi hijo es inocente», espeta.

El pase de este documental en la Casa Amèrica de Barcelona parecía tener, al menos, tres objetivos. El primero, recordar que la repugnante pena de muerte añade, en Estados Unidos, una discriminación por razón de origen, ser pobre, y de raza, ser negro o hispano. Albert lo ha denunciado magistralmente en su documental. El segundo, dar cobertura a quienes bajo el paraguas de la Casa Amèrica de Barcelona, buscan el reconocimiento de los méritos de su país, en este caso Puerto Rico, como Yari Candelas, que ha organizado el ciclo que se llama oficialmente Muestra independiente de documentales puertorriqueños en Barcelona. Mérito que contó con la presencia, en la emisión de ayer del documental de Albert, de los padres de nuestro añorado colega Jordi Saladrigas, que fue compañero de la guionista del documental, Marel Malaret.